Terapia Narrativa es una oportunidad para reescribir tu vida como un libro abierto.
Introducción
Cada persona guarda dentro de sí un libro invisible, lleno de capítulos que hablan de alegrías, heridas, aprendizajes y sueños. Cada persona guarda dentro de sí un libro invisible, lleno de capítulos que hablan de alegrías, heridas, aprendizajes y sueños.
La Terapia Narrativa nos invita a abrir ese libro y mirar con calma las páginas, no para juzgarlas, sino para descubrir nuevas formas de contarlas.
El corazón de este enfoque
La Terapia Narrativa nació en los años 80 gracias a Michael White y David Epston.
Su idea central es luminosa: “la persona no es el problema, el problema es el problema”.
Esto significa que nuestras dificultades no nos definen; somos mucho más que ellas.
Cómo funciona
- El terapeuta acompaña como un editor sensible: ayuda a separar la identidad de los conflictos.
- Se exploran las historias dominantes (esas que nos hacen sentir atrapados) y se buscan relatos alternativos que nos devuelvan fuerza y esperanza.
- Se utilizan metáforas, cartas, conversaciones y documentos que refuerzan la identidad preferida, es decir, la versión de nosotros mismos que queremos cultivar.
Con la practica de la Terapia Narrativa se obtiene empoderamiento, resiliencia y una identidad renovada.
- Empoderamiento: la persona se reconoce como autora de su historia.
- Resiliencia: se descubren recursos internos y externos para seguir adelante.
- Identidad renovada: se construye un relato más rico, esperanzador y humano
¿Qué hace la Terapia Narrativa metafóricamente?
La Terapia Narrativa es como cambiar la tinta con la que escribimos nuestra vida. No borra lo vivido, pero nos permite darle un nuevo sentido: transformar el miedo en aprendizaje, la herida en cicatriz que habla de fortaleza, y el silencio en voz propia.
